Un proyecto de Verónica Ruth Frías. 2012. Introducción
Ella, desde tiempos ancestrales
ha portado y creado dentro de su ser-útero a las nuevas mujeres y a los nuevos hombre,
ha cobijado bajo su piel al huevo, a la semilla que, fertilizada, se ha
desarrollado muy dentro de ella. Y es en este proceso lento, en el que el
embrión ha ido pasando por sucesivos estados de desarrollo hasta alcanzar la
madurez suficiente para poder sobrevivir fuera, donde la portadora sufre un
gran cambio físico y mental, hasta que el huevo está preparado para ser cascado
y el cordón está listo para ser cortado; la vida está preparada para asomar sus
orejas al mundo.
El proceso de maduración del
huevo, embrión, bebe, es una carrera hacia la meta en la que por ahora solo han
podido participar las mujeres, es una batalla que debe de correr sola, con la
carga que esto conlleva, con el esfuerzo y la dificultad de tener que respirar
para dos; de comer y dar de comer a dos; de sustentar a dos. Son-somos las mujeres
las semillas de la tierras, las dadoras de vida, las puertas del nacimiento.
Este proyecto intenta
plantearse como un canto a la vida, a la mujer, a la portadora de la semilla. Por
ello se ha planteado por y para las mujeres
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